lunes, 30 de julio de 2018

CONVERSACIONES - EN EL 2006





Felicidades

Agosto 2006







AMPARO

¿Qué tal esa soledad?

Sé que no estoy sola

Esa sabiduría es la mejor compañía

*









domingo, 29 de julio de 2018

A FERNANDO PESSOA - SI YO FUERA LIDIA



Ricardo Reis
(Heterónimo de Fernando Pessoa)



El lecho del río

          Ven a sentarte conmigo, Lidia, a la orilla del río. Sosegadamente miremos su curso y aprendamos que la vida pasa, y nosotros no estamos con las manos enlazadas. (Enlacemos las manos)

Me he sentado contigo a la orilla del río. Sosegadamente mirabas su curso. Querías enseñarme que la vida pasa y no tenías mi mano entre las tuyas. El cauce el río fue mi lecho. Pasé desapercibida ante tus ojos. ¿A quién hablabas?

          Después pensemos, criaturas adultas, que la vida pasa y no queda nada, nada deja y nunca regresa. Va hacia un mar muy lejano, hacia el Hado. Más lejos que los dioses.

Sentada a tu lado, quieta, querías enseñarme que la vida pasa y no queda nada, nada deja y nunca regresa. ¿De qué lugar más allá de los dioses hablabas? ¿Y a quién? pues el cauce del río era mi lecho y pase desapercibida ante tus ojos.

          Desenlacemos las manos, porque no vale la pena que nos cansemos. Ya gocemos, ya no gocemos, pasamos como el río. Más vale saber pasar silenciosamente. Y sin grandes desasosiegos.

Desenlazaste tu mano de la mía porque no valía la pena cansarse. Querías enseñarme a pasar silenciosamente, sin grandes desasosiegos. Tu mano me señaló el cauce del río, y yo, sumisa, me acosté en él. Mirabas abatido el curso del río, pero yo, pasé desapercibida ante tus ojos.

          Sin amores, ni odios, ni pasiones que levantan la voz, ni envidias que dan movimiento excesivo a los ojos, ni cuidados, porque si los tuviese el río siempre correría. Y siempre iría a dar al mar.

Sin amores, ni odios, ni pasiones que levanten la voz. Así me querías a tu lado. Pero una hembra ocupó mi lugar y el río me llamó a que yaciera en su lecho. 


          Amémonos tranquilamente, pensando que podíamos, si quisiésemos, trocar besos y abrazos y caricias. Pero más vale estar sentados uno junto al otro. Oyendo correr el río y viéndolo.

Pensabas en lo que podíamos hacer y no querías. Querías estar sentado junto a mí, pero me señalabas cuál era mi lugar en el lecho del río. Sumisa en él duermo.

          Cojamos flores, pon en ellas tus manos y llévalas al seno, y que su perfume suavice el momento, este momento en que sosegadamente no creemos en nada, paganos inocentes de la decadencia.

Desde el lecho del río te oí hablar de flores, de perfume, de la muerte sosegada, pero ¿con quién hablabas, si yo yacía en el lecho de tu río?

          Al menos, si yo fuera una sombra antes que tú te acordaras de mí, sin que mi recuerdo te arda, hiera o te conmueva, porque nunca enlazamos las manos, ni nos besamos. No fuimos sino niños.

¡Pobre amado mío! Demasiado infantil para serlo.

          Y si antes que yo llevaras tú el óbolo al barquero sombrío, yo nada tendré que sufrir al recordarme de ti. Me serás suave a la memoria recordándote así a la orilla del río, pagana triste y con flores en el regazo.

El curso del río me lleva hacia un lejano mar, hacia el hado y allí volveré a despertar en la tierna mirada de la inocencia.




viernes, 27 de julio de 2018

CRONOS Y ESE ESPEJO






Así venimos a este mundo: en blanco. Pero no, como suele decirse, para que otros escriban nuestra vida (padres, educadores, circunstancias ambientales o económicas), sino para desarrollar, en esas páginas que la historia humana nos reserva, lo que el propio nombre significa.

El nombre es el pan que cada niño trae bajo el brazo. Esta empresa es tan difícil como valiosa por su complejidad.

Y hace falta tiempo.

Los griegos al tiempo le llamaron Cronos y Goya lo pintó como un monstruo que devora a sus hijos. Pero el pobre Cronos tiene otros rostros más amables. Si pudiéramos escucharle oiríamos cómo suplica que su fealdad no nos asuste. Este gigante grandote, espera que tengamos para él un espejo (de su tamaño) en el que su bondad pueda, también, reflejarse.

Las sorpresas siempre son recíprocas.




martes, 24 de julio de 2018

lunes, 23 de julio de 2018

DEPORTE SIN INSULTOS






















EJEMPLOS DEL FÚTBOL BASE



Hace poco, no sin tristeza, un entrenador de fútbol base se quejaba del gran obstáculo que suponía para él, a la hora de transmitir valores, el mal ejemplo que sus jugadores observan en televisión por parte de los profesionales del balompié (que, dicho sea de paso, no recibe por parte de los medios de comunicación la debida crítica).

Es indudable que el deporte en general puede ayudar (aunque no pueda decirse lo mismo en todos los casos) en la educación de los jóvenes. Desde la Asociación Deporte Sin Insultos, queremos felicitar a dos clubes de base cuyo trabajo merece nuestro aplauso: la Escuela Municipal de Fútbol de Aluche (Madrid) y la Escuela de Fútbol Sala de Águilas (Águilas, Murcia). Ambos están hermanados con nuestra asociación.

El primero de ellos recibió hace un mes, por parte del Comité de Árbitros de Fútbol de Madrid, una placa en reconocimiento a la labor que está desarrollando “a favor del juego limpio, contra el insulto y por el respeto a los árbitros”.

El segundo, en su debut en la liga infantil, siguió con su campaña a favor del respeto y la deportividad, portando, junto con los compañeros del equipo adversario y el árbitro, una pancarta con un bello mensaje.

Sin duda, podrían ser otros muchos clubes de base los reconocidos en mi escrito, pues sé que todavía quedan bastantes románticos del fútbol para los que el marcador no es lo decisivo; románticos a las que los modelos que ofrece la televisión (eso de ganar de cualquier manera, por ejemplo) les ponen muchas trabas; románticos que, a pesar de todo, siguen entregando su vida por puro amor al deporte y a los jóvenes. Gracias a todos.



Ángel Andrés Jiménez Bonillo, árbitro de fútbol y Presidente de la Asociación Deporte Sin Insultos. 2 de noviembre de 2011.
















































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domingo, 22 de julio de 2018

INICIATIVA POR UN FÚTBOL RESPETUOSO Y EDUCATIVO









Iniciativa por un fútbol respetuoso y educativo


Les escribe Ángel Andrés Jiménez Bonillo, un exárbitro al que las federaciones y los propios comités de árbitros ignoraron cuando les propuso diferentes iniciativas en favor del respeto y la no–violencia  en el fútbol (y en otros deportes). Tampoco otros organismos deportivos o partidos políticos se interesaron por este tema. Los clubes profesionales, tampoco.

Ahora me dirijo, especialmente, a los clubes más modestos, esos en los que se forma la inmensa mayoría de nuestros jóvenes deportistas, y les pido, respetados lectores, que si lo que van a ir leyendo les parece interesante, lo divulguen para que llegue al mayor número de equipos de base. Creo que estos pueden llevar a cabo iniciativas como la que yo propondré en este correo (los profesionales también podrían, y sería maravilloso, por cierto); creo que tienen la bella posibilidad de trabajar día a día en favor de la educación y la deportividad, de la auténtica formación humana de los chavales, siempre buscando eco en los espectadores (la mayoría, familiares de los menores que juegan), cuya actitud es decisiva para que los jóvenes vivan el deporte en su estado más puro y sano.

Lo que les dejo a continuación es una serie de medidas que, a mi parecer, podría ayudar a hacer del fútbol (o de otros deportes a los que pueda venir bien) un referente educativo, una fuente de inspiración para el crecimiento de nuestros jóvenes, y, por tanto, para la mejora de nuestra sociedad. Y todo ello sin gastos (o prácticamente), lo cual es importante. Seguro que la actitud de un club inspiraría a otros, y así sucesivamente hasta lograr una gran victoria social a través del deporte; una cadena de buenos principios y de buenas personas que acabaría siendo imparable y que daría grandes frutos generación tras generación. ¿Por qué no intentarlo?

Las medidas están redactadas como si ya hubieran sido asumidas por los responsables de un club y estos las publicasen. Ojalá muchos se lancen a adoptar estas u otras parecidas.
  1. Condenamos toda muestra de violencia (física o verbal). Nuestros entrenadores y jugadores se comprometen  a mostrar un comportamiento ejemplar entre ellos y hacia los árbitros, los rivales y los espectadores. En caso de quebrantamiento de esta norma, recibirán una sanción (que, según la gravedad o la acumulación de faltas, podría llegar a la expulsión de la entidad), independientemente de que su acción sea castigada o no por los distintos comités.
Por lo que respecta a los aficionados, los que observen una conducta violenta (física o    verbal) serán invitados a abandonar las instalaciones. En caso de negarse, serán avisadas las Fuerzas de Orden Público. No queremos que nuestros jugadores piensen que la violencia forma parte del deporte y de los valores que un buen ciudadano debe mostrar. 
  1. Condenamos cualquier intento de engaño por parte de nuestros jugadores. Es inadmisible que estos intenten que el árbitro tome decisiones equivocadas y se alegren por ello. Queremos transmitir que el fin no justifica los medios, que no hay que ganar de cualquier manera. Inculcaremos a nuestros futbolistas que deben ayudar al árbitro a tomar decisiones correctas. Así, por ejemplo, les diremos que deben reconocer si se han dejado caer en el área rival (o si un saque de banda corresponde al adversario en vez de a nuestro equipo), ya que debemos hacer lo posible para que el árbitro tome la decisión más justa. En este sentido, los colegiados, los rivales y el propio valor del honor merecen todo nuestro respeto, y no queremos utilizar la mentira para conseguir algo que moralmente no nos corresponde. En general, trataremos de ayudar al árbitro en su difícil labor, pues conviene que los jóvenes amen la búsqueda de la justicia, en el deporte y en la vida. Esto es importante en el crecimiento interior de todo ser humano. Y si alguna decisión que consideramos equivocada nos perjudica y no puede ser rectificada (porque el rival no quiera reconocer la verdad, o porque no la sepa con certeza –como en muchos fueras de juego, por ejemplo–), aceptaremos el error (o lo que pensamos que lo es), como aceptamos los nuestros a la hora de rematar, de despejar, de efectuar sustituciones, etc.
Si alabamos que un tenista reconozca que la pelota golpeada por su contrincante ha tocado la línea, ¿por qué no aplaudir conductas similares de un futbolista? Los grandes valores, como el honor o la verdad, están muy por encima de las victorias y de las derrotas. El futuro de nuestros jóvenes y la integridad de nuestra dignidad como humanos nos importan mucho más que los trofeos. 
  1. No queremos que nuestros jugadores se vean sometidos a ninguna presión por ganar o por ser los mejores. Consideramos que Gandhi tenía razón cuando afirmaba que “nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo, no en el resultado” y que “un esfuerzo total es una victoria completa”. Por tanto, inculcaremos los valores del esfuerzo y el trabajo en equipo, sabiendo que a veces no bastan para ganar los partidos, pero sí para sentirse satisfecho y orgulloso.

  1. Convocaremos charlas formativas para padres, entrenadores y jugadores con el objetivo de asentar los valores que queremos que presidan nuestro proyecto. En estas reuniones, si es preciso, comentaremos actitudes positivas y negativas de los profesionales, esas que vemos a diario en la televisión. Los buenos ejemplos son modelos a seguir; los malos deben ser tratados y debe explicarse por qué no son deseables. Luchando a favor de los buenos valores, conseguimos que las vidas de nuestros jugadores sean más plenas y que ellos puedan convertirse en referentes para otras personas. 

La lista de propuestas, como ustedes pueden imaginar, es infinita. Y podríamos citar otras: leer por megafonía un manifiesto y/o una cita célebre antes de cada partido para mandar un mensaje de respeto y deportividad, de buenos principios, con el fin de que los espectadores, los jugadores y el resto de participantes en el encuentro lo encaren con el mejor espíritu; sacar una pancarta con el lema que cada club considere más oportuno y el anuncio de la web en la que recoge los puntos fundamentales de su campaña por el respeto, ayudando con ello a difundir sus ideas e invitando a otros clubes a promover campañas que vayan en la misma línea; etc.

En definitiva, se trata de fomentar los valores que dan sentido al deporte y a la vida, de ayudar a los chavales a través del fútbol (o, repito, del deporte que sea) a aprender que siempre es preferible lo que sana a lo que enferma, lo que enriquece por dentro a lo que empobrece, lo que nos une a los demás y nos da la mejor versión de nosotros a lo que nos separa y nos degrada. Invito a todos los responsables de clubes que crean en este mensaje a que ayuden a sus jugadores a crecer cada día y a implicarse en algo grande: la mejora de uno mismo y de la sociedad. No dan ninguna copa por ello ni se cobran primas desorbitantes, pero, sin duda, sería el mejor de los triunfos.


Ángel Andrés Jiménez Bonillo, exárbitro de fútbol.    4 de enero de 2016.

viernes, 20 de julio de 2018

jueves, 19 de julio de 2018

SOBRE JUAN RAMÓN JIMÉNEZ










EL VIAJE DEFINITIVO

                              Corazón en el viento. 1910-1911

Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros cantando;
y se quedará mi huerto, con su verde árbol,
y con su pozo blanco.

Todas las tardes, el cielo será azul y plácido;
y tocarán, como esta tarde están tocando,
las campanas del campanario.

Se morirán aquellos que me amaron;
y el pueblo se hará nuevo cada año;
y en el rincón aquel de mi huerto florido y encalado,
mi espíritu errará, nostáljico…

Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol verde, sin pozo blanco,
sin cielo azul y plácido…
Y se quedarán los pájaros cantando.

                                 Juan Ramón Jiménez



Lo que yo interpreto

A Juan Ramón Jiménez
(a una preocupación que no lo fue, en el fondo)

Se quiere ir y no puede.
Y deja el huerto, un canto, el pozo y un árbol
a modo de testigos de su paso
Y le parece poco.

Intenta que se vayan
los que vieron su luz
para sentir nostaljia de sí mismo
Y no le satisface

Se queda, finalmente,
haciendo que se vayan los demás
... sin hogar ... sin cielo azul
Él con su soledad, que le seguirá acompañando.


María Bernad                         





domingo, 15 de julio de 2018

CONVERSACIONES EN EL 2004









Un mundo de enlaces
(Cito a Eliseojavier)

31 de diciembre de 2007
Sabían que me gusta escribir y Esther y Kilo dieron por hecho que congeniaría bien con "Permiso de Ausencia" de José Enrique Altarriba.
Fue un regalo multiplicado. La sorpresa del detalle; el cariño de ellos hacia José Enrique; la oportunidad de conocer a un escritor "peñaflorido". La provocación a conversar… Unos días después hablamos en directo de su libro y alrededores.

Enero 2008
Le ofrecí un café en mi blog. Lo tomaremos con Leona Andrea pues ella también me preguntó un día por "mis decepciones".

Final de agosto 2004
Leona Andrea – ¿Alguna decepción?
María – No, ninguna. (Comprenderás que no hable mal de mí).
Las decepciones son proyectos que teníamos para "el otro".
Por eso esperábamos una determinada reacción, actuación, respuesta, compañía.. ¿pero, sabíamos qué les demandaba en ese momento su naturaleza? ¿Sabíamos con qué fuerza contaban para afrontar ese reto y si podían acompañarnos en el nuestro? ¿Nos importaba saberlo? ¿Esta indiferencia no supone una decepción mucho mayor que debería asumir quien se queja?
La realidad nunca decepciona. Los errores provocan dolor, angustia, inseguridad… pero si se asumen como ensayos en primera persona las puertas se abren solas. La vida está llena de pasillos (niveles) y de las habitaciones (personas) tenemos que encontrar la llave (clave) con la que entrar en nosotros mismos.
*

sábado, 14 de julio de 2018

ENERGÍAS ALTERNATIVAS




Nos recargamos de energía positiva estando cerca de buena gente.

Antonio es una de esas personas interesantes que se agradece haber conocido.












viernes, 13 de julio de 2018

CÓMO AFRONTAR LAS DIFICULTADES






Yo tampoco he olvidado nada pero, como dice el poeta, se puede hablar del desamor con amor.





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lunes, 9 de julio de 2018

HYPNOS y THÁNATOS

(Euda)



Que la vida es el despertar del sueño de la muerte,
parece deducirse del diálogo que tienen Hypnos y Thánatos.

Un misterio que no es tan simple como parece, sino mucho más sencillo.





jueves, 5 de julio de 2018

AMISTAD




Frío, insensible a nuestras desventuras nos parece a veces el amigo. Pedimos consuelo y nos acoge en un duro lecho de campaña.

La confidencia que nos calmaría abre la puerta a un "claro espejo" en el que aparecemos sin camuflajes, como somos.

Eso nos ofrece la amistad, distancia desde la que descubrir nuestro "tesoro".


18 julio 1994




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