Hablaban.
Deduje que eran amigas y algún conflicto había con el novio de una de las dos.
La otra le decía: "No me quiero enfadar con él y por eso miro a Rigoberto desde tus ojos. Con los míos lo que veo no me gusta nada."
Sin duda eran amigas.
Bajé del autobús con otro ánimo y decidí ponerme en el lugar del otro para ver que se ve sin el antifaz de los prejuicios.
Ya os contaré.
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