La Playa
Una excusa para reflexionar
Una excusa para reflexionar
“Una playa grande, solitaria. No se ve el horizonte. Una silla. Al final una escalera.”
Cada cual trae su espacio.
El tiempo es la batuta que armoniza la banda sonora del destino.
Sentarse, sentirse, acomodarse en uno mismo, es el mejor espectáculo que podemos contemplar.
Sentarse, sentirse, acomodarse en uno mismo, es el mejor espectáculo que podemos contemplar.
¿Hay un final?
El final es únicamente un eslabón más que engarza los balbuceos del principio
y ese cierre de ciclo nos da la clave para entender a qué se debían unos malentendidos que sólo lo han sido porque faltaba ese último ingrediente dinamizador de nuestro nombre.
Es "una serpiente que se muerde la cola" y nos dice que la divinidad, "la felicidad", es un círculo cuyo centro está en todas partes.
Esto es lo que veo desde esa solitaria silla que parece colocada por algún amigo que quisiera ver amanecer.
Ha sido un placer.
Es "una serpiente que se muerde la cola" y nos dice que la divinidad, "la felicidad", es un círculo cuyo centro está en todas partes.
Esto es lo que veo desde esa solitaria silla que parece colocada por algún amigo que quisiera ver amanecer.
Ha sido un placer.